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Oxide Room 208 es un brutal descenso a una pesadilla viviente; en parte tormento psicológico, en parte prueba de supervivencia. Ocho desconocidos se encuentran prisioneros en una fusión putrefacta de motel de carretera y frío laboratorio clínico. En algún lugar entre las sombras, una figura conocida como "Doc" manipula cada uno de sus movimientos, mientras Eva, un alma antaño inocente ahora convertida en un recipiente, remodela la realidad con su mente dañada. La única salida es la misteriosa Puerta 208, pero cruzar su umbral no es nada sencillo.
El mundo que te rodea es tan inestable como espeluznante. Deambularás por siete entornos vívidamente grotescos: los pasillos infestados de moho de un motel en ruinas, laboratorios subterráneos húmedos y secretos, un invernadero en descomposición, los bordes sigilosos de un bosque silencioso y la oscuridad sofocante de una mina abandonada. Cada lugar palpita con una amenaza orgánica, como si las propias paredes estuvieran vivas y observando. Las personas con las que te encuentras pueden no ser aliados. Un excursionista caníbal, un icono del rock venido a menos, streamers de terror perseguidores de la fama; cada uno tiene sus propios motivos, y en ninguno se puede confiar sin correr riesgos. Incluso la muerte no ofrece liberación; los que caen pueden volver como retornados, más peligrosos e irreconocibles que antes. Cambia sin problemas entre la claustrofobia de la primera persona y la conciencia más amplia de la vista en tercera persona, adaptando tu perspectiva al peligro que te acecha. Utiliza el modo fotográfico integrado para capturar momentos que preferirías olvidar.
Gracias al motor Unreal Engine 5, los efectos visuales fotorrealistas del juego y la iluminación trazada por rayos crean un mundo tan tangible que casi puedes oler la podredumbre. Todos los personajes cobran vida gracias a la captura facial y de movimiento, y sus más mínimas expresiones delatan miedo, malicia o locura. La escalofriante banda sonora, con contribuciones de la banda de rock española Sôber y los creadores musicales ANBR, amplifica cada tenso latido del corazón y agudiza cada sobresalto repentino.
La supervivencia es una batalla sin cuartel. Los recursos escasean, los enemigos son despiadados y la indecisión es letal. Oxide Room 208 quiere machacarte y poner a prueba tus límites.